La industria química española es un sector en auge. Tras la crisis económica sube el consumo y la demanda tanto dentro como fuera del país, y ello ha llevado a la industria química nacional a superar los 60.000 millones de euros de facturación.
Las exportaciones para obras extranjeras, puntal del crecimiento
En cifras porcentuales la industria química ha crecido un 47 % respecto no a los datos de la crisis, sino a los previos al estallido de la burbuja de la construcción (2007). Y es un ascenso basado en el tirón de la exportación. Aunque las obras en España no estén al nivel de las que había en 2007, en otros países el sector de la construcción aún está en pañales y tiene mucho margen de mejora.
Por ello, de los 60.000 millones de facturación, 34.000 son ventas a empresas o instituciones de otros países. Y el pico aún no ha sido rebasado. La patronal del sector de la industria química considera que las ventas crecerán un 0,7 % hasta finales de este año 2017, y un 3,1 % adicional en el próximo 2018.
Y de esta mejora de las cifras se ven beneficiados los trabajadores empleados en empresas del sector. Actualmente hay 190.000 empleados en la industria química que tienen un sueldo muy por encima de la media del resto de españoles: 37.750 euros anuales.
Una evolución progresiva y ascendente desde el boom de la construcción
La evolución de esta industria ha sido ascendente y progresiva, lo que demuestra que tiene unas bases sólidas y un porvenir alentador. En 2007 los ingresos de la industria química ascendían a 49.743 millones de euros, el pasado 2016 rozaron los 60.000 y para este 2017, como se dijo anteriormente, superarán esta cifra simbólica.
Igual ocurre con las exportaciones. Si en 2007 eran 22.878 los millones de euros de facturación de ventas al extranjero, actualmente son 34.000.